martes, 5 de junio de 2007

Derramando un poco de luz, un poco de esencia....(o quizá una humilde introducción)





Soy un hombre libre, de edad madura , sano juicio y severa moral.....que a su paso por el mundo, ha podido conocer gente de lo mas encumbrada, como gente del llano. Al respecto, me ha llamado la atención, un cierto común denominador en casi todos ellos: Una sensación de vacío.
No sin algo de tristeza, me aproximé al abismo de infinidad de almas; pudiendo percibir que tal dolencia, presenta variaciones, en función de género y edad. No obstante, cuanto más joven el individuo, mayor es el vacío interior......mayor la desolación del alma......
Razonando sobre sus motivos, lastimosamente he de concluir, que todo se reduce a la mas espantosa miseria espiritual experimentada por el ser, en esta sociedad aparentemente adelantada; y hasta pareciera que existe una relación directa, pues el vacío resulta inversamente proporcional al avance tecnológico experimentado.
La pérdida de individualidad, producida por una masificación implacable, producto a su vez, de la adopción de costumbres y modos de vida foráneos, impelidos por un deseo de indivialidad ; pero que sumergen al individuo en una contradictoria masificación.
No dejo de preguntarme, si es el precio de la tan enaltecida y deseada globalización.... por el acceso indiscriminado a medios de comunicación que son mal usados por quienes ejercen el protervo servicio de lo vil.....o por quienes incautamente, tratan de llenar ese vacío con relaciones impersonales que los conducen irremediablemente al despeñadero.......
No me gusta lo que veo, cuando veo al hombre mismo.....no me gusta lo que veo, cuando veo lo que el hombre hace.....no me gusta lo que veo, cuando veo lo que el hombre deja de hacer......

Entonces, surge la pregunta ineludible...¿Qué debo hacer....?...y la respuesta emerge como un grito del alma, que retumba dentro de mi ser......derramar un poco de luz, un poco de esencia, para quien la necesite, y para quien la quiera; abrigando la dulce esperanza, de sentir que mi paso por el mundo no ha sido estéril, y que no he gastado mis fuerzas en vano........
Evan E. Morgan

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